El cerdo ibérico es feliz en esta época

Los cerdos ibéricos en esta época son felices. Sí, como lo oyen. Y la razón no es otra que el comienzo de la montanera. Para quienes no estéis muy puestos en este sector debéis saber que de la montanera depende principalmente la calidad del producto, de buen jamón de pata negra.

Este término que hace referencia a  la última fase de la cría del cerdo ibérico y consiste en dejar pastar al cerdo en la dehesa, donde se produce el engorde tradicional, entre bosques de alcornoques y encinas, siendo su fruto, la bellota, el alimento fundamental antes del sacrificio.

Por eso es fundamental mantener la dehesa en el estado óptimo, bien es cierto que ésto no sólo depende de la mano del hombre, también es muy importante el clima, como ocurre en cualquier otro tipo de paisaje campestre.

Y no se pueden ni imaginar la vida que llevan los cerdos en la dehesa. Sus dos actividades más importantes en esta época, que dura hasta marzo, es comer y dormir. Si el año ha sido generoso en aguas, los cerdos caminarán sobre un manto de bellotas, por lo que encontrarán el alimento sin el menor esfuerzo. Este año la lluvia ha sido escasa,y esto siempre influirá en la producción. Cada montanera es única porque el número de cerdos que se pondrá alimentar dependerá de la cantidad de bellotas disponible en esta época en la dehesa.

La dehesa es el bosque mediterráneo que se destina tradicionalmente al mantenimiento del ganado, las actividades cinegéticas y el aprovechamiento de recursos forestales. En España es abundante este tipo de paisajes, que es necesario cuidar. Tengan en cuenta que de la agricultura y la ganadería depende alimentarse bien y llevar una vida saludable. Las nuevas tecnologías podrán ayudarnos a mejorar la producción pero siempre hay que contar con el cuidado de la naturaleza para que el producto sea de excelencia.

En Casa Verita hacemos cada año una selección de los mejores productos atendiendo cuestiones como las explicadas en este post. Porque lo bueno sólo puede ser bueno, pero lo inmejorable siempre está en nuestras manos.